La vida de Alejandro Guerrero


Por Raúl Valle

Ha fallecido Alejandro Guerrero, un intelectual y trabajador de prensa revolucionario y comunista que hizo de su existencia un compromiso con la teoría, la militancia, la escritura y la publicación de textos marxistas. 

Hizo una contribución fundamental a la construcción de un nuevo rumbo para la humanidad.

Estaba preparando la segunda parte de la historia del trotskismo. Militó en el POR, el Partido Obrero, Política Obrera y luego como intelectual de izquierda en el Círculo de Trabajadores, esta última fue una de sus actividades políticas donde se destacó por caracterizar correctamente la guerra imperialista.

En un debate con Altamira criticó su posición estratégica de derrota de Rusia ante la OTAN.

Por un lado, el yerro de Altamira era ignorar la diferencia entre el Putin reaccionario y la soberanía de los trabajadores en Rusia para luchar contra el agresor imperialista de la OTAN y sus correas de transmisión, y derrotar al régimen político y social. 

Y por el otro, negar la teoría de Trotsky de situarse en el terreno correcto y oprimido de la lucha de clases contra el imperialismo: "A pesar de su dirección".

https://circulodetrabajadores.com.ar/?p=1017

En definitiva, es la posibilidad de construir con los trabajadores en lucha una alternativa. 

Algo parecido sucedió con la caracterización de Cuba y el inicio de la crisis con el Partido Obrero, y últimamente con Venezuela donde Política Obrera y casi toda la Izquierda no se pronunciaron por el voto a los explotados.

Alejandro rompió sistemáticamente con el aparato del PO siendo rentado del comité editorial y no dudó en solidarizarse con los expulsados ​​que luego conformarían Política Obrera. Luego borraron sus firmas en las notas en la página web del partido por la de corresponsal.

Luego como miembro de Política Obrera, porque sí tenía un círculo, y sí cotizaba y pasaba periódicos, ante las diferencias de resolver los problemas políticos exclusivamente en el terreno electoral, hizo pública su caracterización y lo aislaron, dijeron que como no participó en la “Tendencia” ya no era militante orgánico, entre otras cosas. 

En sus últimas letras dedicadas a la muerte de Alejandro, Marcelo Ramal se confunde, dice que Alejandro se aisló, cuando en realidad lo separaron, pese a que le decían que estaba todo bien. Como es el folklore del partido a muchos nos hicieron lo mismo y nos citaron a saldar diferencias en una reunión pero que luego nadie se hizo presente.


La posiciones de Alejandro al respecto:


https://www.facebook.com/1191694252/posts/10222119211667917/?app=fbl

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Un libro importante de Alejandro es “El peronismo armado”, el que se agotó rápidamente, inicialmente surgió como una biografía pero luego maduró a clarificar una época y su superación.

En el Partido Obrero generó debates interesantes dado que fue unos de los primeros abordajes desde la crítica y el materialismo histórico, por ejemplo comentaron su obra Eduardo Salas y otros camaradas, también polemizaron Bonavena, referentes de Abelardo Ramos, sectores académicos y otros.

Como periodista de investigación realizó un trabajo fundamental sobre la policía, fue con el libro “La Federal, la trama policial del delito, la inseguridad y el miedo” de Editorial Sudamericana. 

En forma metódica desnudó la institución policial y judicial, y como Víctor Serge contando con fuentes y documentación del estado, desnudó la podrida institución policial y nos dejó mejor preparados para enfrentar a una parte de la represión del estado.

Con su última editorial “El Viejo Fantasma” publicó muchos textos y PDF de una gran novedad, también le permitió pagar “la olla” cotidiana para comer. 

Acompañó la construcción leninista de una prensa obrera con varios cursos por Meet de literatura, periodismo y marxismo con numerosos alumnos. 

Estaba preocupado por conocer el manejo de las redes y lograr una charla con los simpatizantes por Stream. 

Construyó un grupo con simpatizantes donde estaba Capitán de Venezuela que respetaba, las últimas notas de Opción Obrera las reprodujo en forma incondicional y sus notas sobre el tema fueron muy leídas :

https://circulodetrabajadores.com.ar/?p=1048

En el grupo de wasap del circulo de trabajadores había escritores, un compañero trotkista de Cuba, militantes, independientes, estaba uno de sus mejores amigos que era un abogado destacado en la defensa de los trabajadores, un periodista muy reconocido del sur, en la Patagonia, que el gobierno le está realizando censura a su trabajo de periodismo para cubrir las luchas contra el extractivismo y otras. Estaba muy preocupado por él.

Había docentes, jubilados, enfermeros, jóvenes, mujeres trabajadoras y trabajadores de otras organizaciones políticas que lo respetaban.

Realizaron una colecta y se solidarizaron con su familia.

Sus últimos libros con el “Viejo Fantasma” fueron:

“Teoría Marxista del Estado”, “Problemas de la Vida Cotidiana”, “Acerca del suicidio,la demencia, la mujer y la vida cotidiana”, “Teoria de la violencia”, “Militancia Clandestina”, “Teoría Marxista del partido político”, “Pedazos de tiempo”, y otros.

Unos de sus mayores triunfos es haber editado con la ayuda de un compañero de Chile el libro “Mi vida con Lenin” de Nadezhda Krúpskaya.

Tuvo muchas expectativas con la reedición del libro “Educación y lucha de clases” de Aníbal Ponce que no dio muchos resultados en la aceptación.

Difundió un folleto de su autoría que fue sobre “Lenin y la Asamblea Constituyente” que polemizó con un camarada y amigo del POR.

Su experiencia en el movimiento estudiantil le permitió construir centros de estudiantes durante el Cordobazo, luego se estructuró en la Izquierda Comunista y Revolucionaria y no dudo construir una alternativa junto con Altamira y Lora.

Una charla que siempre recordaba era en el comité central cuando Pablo Riesnik, que poseía información calificada del Banco Central, debatía los pronósticos de la crisis y aplicaba en el análisis de la realidad política.

Cómo periodista construyó varios cuerpos de delegados y comisiones internas en muchos medios periodísticos, una de ellas fue en 1982 con Alfredo Leuco cuando era militante del Partido Comunista y él de Política Obrera, habían organizado la resistencia en las barbas de Héctor Magnetto y construido la primera comisión interna desde el golpe de 1976.

Cubrió por EEUU y Europa varios eventos deportivos, era pasional con el boxeo, y de esos viajes, su estadía en París fue una de las más bellas, “tomando café al sol cerca de la torre Eiffel”, decía.

Sus clases de literatura las preparaba con Borges, García Marqués y Cortázar, consideraba que lo mejor de un cuento y una historia era en sus primeras líneas, sus cursos de materialismo dialéctico, periodismo de investigación eran metódicos, podía llegar a explicar el inicio de la filosofía con los griegos, con los jóvenes hegelianos, y el materialismo dialéctico.

Sabía cómo contar una buena historia, le gustaba la recolección de datos, sobre todo destacaba la minuciosidad de fuentes en la historia del movimiento obrero de Inglaterra de Engels, “una obra maestra”, decía. 

Tenía como base de su formación periodísticas a Émile Zola, a Truman Capote y por supuesto con su preferido que era Rodolfo Walsh.

Fue la diacronía y sincronía del género de investigación periodística para muchos, a veces podía explicar todo esto a los gritos en un Burguer King donde daba clases y dejaba a todos los comensales y estudiantes en silencio mientras anotábamos magnetizados por sus hechizos marxistas.

Sus últimos meses se agravó su cuadro de dolencias y sus médicos del PAMI no lograron un diagnóstico y un tratamiento efectivo de su enfermedad. Cuando ya no pudo escribir siguió luchando para continuar con las app que de forma oral transcriben a texto.

Quedó inconcluso un muy buen trabajo sobre la seguridad social y el ataque a los jubilados y la clase obrera del gobierno de Milei.

También estaban cercana a su memoria las Jornadas del Argentinazo, que con Josefina marchó con el pueblo trabajador sublevado y que derrotó al gobierno de De La Rúa. 

Siempre se preocupó hasta el final por su hija y le escondió sus dolencias. De ella se sentía orgulloso como estudiante y trabajadora. Ella fue quien lo rescató de Bernal, cuidó su biblioteca, una de las más completas, y le brindó una mejor calidad de vida. 

Tenía una sólida formación para la construcción de un partido de los trabajadores, también con los sindicatos, y apostó por la unidad de la clase trabajadora donde gran parte de la izquierda abandonó esta explicación porque hacen una construcción unidireccional del partido, entre otras cosas "un aparato". 

Logró rebelarse contra la opresión a los intelectuales, porque el sistema capitalista y la burocracia oprime a los intelectuales, por eso una dirección revolucionaria debe respetarlos porque junto con la clase trabajadora deben soportar la barbarie de un sistema que actualmente no permite la expresión de una idea. Por eso hay que derrotar este sistema capitalista militarmente y revolucionariamente. Por el Comunismo.

¡Alejandro Guerrero con muchos más están abriendo el camino a la juventud y a los trabajadores!

¡Viva el Viejo Fantasma!

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